Pero, ¿sabes cómo reconocer a un verdadero monstruo? Porque hay monstruos grandes y monstruos pequeños. Unos son rápidos y otros monstruosamente lentos. Hay monstruos con garras, monstruos peludos, monstruos con cuernos… pero detrás de su apariencia espeluznante también hay monstruos tímidos, miedosos o terriblemente entrañables.